El sector energético fue uno de los encargados de arrancar la cumbre empresarial organizada por CEOE (Confederación Española de Organización Empresariales) bajo el título “Empresas Españolas: Liderando el Futuro” y que concluyó ayer.
En sus conclusiones, la CEOE destaca que la transición energética es fundamental para alcanzar la sostenibilidad de nuestro país, así como la importancia de acometer inversiones en energías verdes como palancas del crecimiento para lograr una economía más competitiva, resiliente y sostenible.
En ese sentido, durante la primera jornada en la participaron los máximos representantes de las empresas asociadas a aelēc, quedó reflejado el importante papel que jugará el sector eléctrico en el proceso de recuperación económica como uno de los motores del mismo y cómo la electrificación es la palanca clave para lograr alcanzar los objetivos de la transición energética.
Decálogo de conclusiones de la Cumbre Empresarial de CEOE “Empresas Españolas Liderando el Futuro”
1.- Visión de medio y largo plazo para llevar a cabo las inversiones necesarias para hacer de España un país más competitivo, resiliente y sostenible. La transición energética es fundamental para alcanzar esta sostenibilidad. España puede acelerar las inversiones en energías verdes, que además pueden tener un efecto arrastre en el corto plazo.
2.- La confianza a través de la seguridad jurídica es fundamental. Esa confianza es clave para generar credibilidad y atraer y retener inversiones.
3.- Consenso y diálogo social para llegar a acuerdos que nos ayuden a salir de la crisis. No se deben revertir reformas que han generado crecimiento económico y mejora del bienestar, y en todo caso se deben mejorar aquellos aspectos en los que exista margen.
4.- Un marco regulatorio más flexible y adaptado a los cambios de la economía española.
5.- Colaboración público-privada para mejorar la eficiencia y calidad en la prestación de servicios públicos tanto en el ámbito de la educación y la sanidad como en el de las infraestructuras.
6.- Conservar el tejido productivo a través de medidas que están funcionando, como los ERTEs o las líneas de avales públicos, adaptándolas y acompasándolas a la evolución de la actividad económica de cada sector.
7.- Reindustrialización para generar un empleo de calidad y mejor remunerado. El objetivo debe ser alcanzar un peso del 20% sobre el PIB. Aquellos territorios que superan este porcentaje son los que también presentan menores niveles de desempleo.
8.- Innovación y digitalización del tejido productivo, sobre todo de las pequeñas y medianas empresas y de la Administración pública.
9.- Estabilidad presupuestaria. Hay que disponer del gasto público necesario en el corto plazo para salir de la crisis, y volver a una senda de estabilidad fiscal a medio y largo plazo. Para ello, hay que promover el crecimiento económico y evitar, sobre todo, subidas impositivas en momentos de crisis económica. Otros países europeos están aplicando rebajas de impuestos para salir de la crisis.
10.- Igualdad de oportunidades y el crecimiento inclusivo a través de la formación y la educación. La prioridad son las personas y el empleo, la mejor fórmula de inclusión social; también que no debemos dejar a nadie atrás en la recuperación y en las transformaciones energéticas y digitales. Por último, apuesta por revitalizar el contrato social.
Conclusiones de la mesa de Energía y Sostenibilidad durante la Cumbre Empresarial “Empresas Españolas Liderando el Futuro”
El programa del primer día de esta Cumbre, dedicó su segunda mesa al sector de la energía y la sostenibilidad, en la que contó con las intervenciones de los máximos representantes de empresas socias de aelēc, como José Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola; José Bogas, consejero delegado de Endesa; Francisco Reynés, presidente de Naturgy; y Miguel Antoñanzas, presidente de Viesgo y del Club Español de la Energía; que participaron junto a José Manuel Entrecanales, presidente de Acciona; y Antonio Brufau, presidente de Repsol.
En esta mesa se consideró fundamental contar con un marco normativo transparente, estable, predecible y atractivo, que garantice la seguridad jurídica y promueva la iniciativa privada. Además, se señaló que se deben eliminar barreras regulatorias.
Por otro lado, en este foro se planteó que la sostenibilidad es otro de los grandes ejes sobre los que debe pivotar la reconstrucción, como se reconoce en los programas de apoyo de la Comisión Europea. Otra de las ideas que trascendió en esta mesa es que debemos aprovechar los recursos que la UE puede aportar para transformar nuestra economía y hacerla transitar hacia un modelo sostenible y competitivo y situar a España a la cabeza de la transición energética. No en vano, en nuestro país hay empresas punteras líderes mundiales en sostenibilidad.
En primer lugar, José Ignacio Sánchez Galán (Presidente y Consejero Delegado de Iberdrola) destacó que “vamos a dejar una deuda pública gigantesca como herencia a las generaciones futuras”. “Dejémosles también un país mejor, con reformas que lo hagan más competitivo”, añadió. Sánchez Galán pidió “acelerar el proceso” de reformar, porque, según añadió, “no podemos llegar tarde a esta nueva revolución industrial cuyo tren está ya en marcha”.
Por su parte, José Bogas (Consejero Delegado de Endesa) aseguró que “podemos acelerar e incrementar un 30% las inversiones, y con ello generar 12.000 empleos”. En su opinión, “economía y medio ambiente ya no caminarán nunca más por separado. La sostenibilidad será la que nos saque de la crisis”, ha concluido Bogas.
Francisco Reynés (Presidente y CEO de Naturgy) en su intervención aplaudió el plan de transición energética, que calificó de “atractivo como catalizador de la inversión”. Asimismo, pidió “impulsar la calidad de las infraestructuras del país, sobre todo de distribución eléctrica y transporte, y mantener la apuesta por la digitalización”. “Las empresas deben velar por el interés económico, la creación de valor, la mejora del bienestar y el compromiso con la sociedad”, afirmó.
Cerró la mesa Miguel Antoñanzas (Presidente y Consejero Delegado de Viesgo), quien aseguró que la compañía “se compromete con la recuperación económica del país ofreciendo duplicar sus inversiones en redes de electricidad hasta los 1.000 millones de euros durante los próximos 10 años en torno a tres ejes de apoyo a la transición energética, a la resiliencia frente al cambio climático y al desarrollo económico inclusivo en el reto demográfico”. Asimismo, Antoñanzas pidió al Gobierno “eliminar el límite de inversión fijado en el 0,13% del PIB. Los planes de inversión deben ser desarrollados junto a las Comunidades Autónomas”, añadió.